lunes, 7 de mayo de 2007

Presión ajena

En realidad no es tal presión
Pero sí que tratan de salvar sus remordimientos pasando por encima de los que hemos quedado aquí y que aún les recordamos cómo lo han hecho.
Es increíble la capacidad de manipulación que tienen algunas. No les basta con haberte fastidiado estando viva, sino que vienen a intentarlo después, cuando ya te has ido, cebándose en nosotros, tratando de dividirnos, de hacer chantaje emocional con los más débiles de nosotros.
Por qué no vinieron a buscarte, para compartir contigo las alegrías cuando en la Feria nos dejaron sólos después de tantos años en los que tuvimos que aguantar, quisiéramos o no, las soledades de vuestras parejas ausentes en salidas, idas y venidas.
¿No estamos bastante triste y doloridos para que, encima, traten de maquinar para sus intereses emocionales?
Por qué no fueron capaces de entender cuando estabas que deseabas poder disfrutar del fruto de tu trabajo y del de tu madre, de vuestro esfuerzo para criarlas a todas, para que salierais adelante, sin la ayuda de nadie más.
A mí no se me olvida nada de lo que me contaste, la comida que era para ti y que otro se comía antes de que tú llegarás.
Todo por no hablar de las Navidades, de estas últimas Navidades donde, una vez más, nos bordaron el paño. Tú me entiendes.
Tampoco olvido el tratamiento injusto, mezquino, insensible, fascista de quien nos echo de forma encubierta de casa de tu hermana pequeña, esa que ahora se siente tan mal y que trata de enjugar sus penas aumentando las nuestras. Cómo te sentirías para llevarte el libro de sus casa y pensar y decirme que no se lo volverías a dejar.
Hay demasiadas cosas que no olvido ni pienso olvidar, pero tampoco quiero que nos hagan daño buscando las coartadas a la mala conciencia, reventando nuestra tranquilidad y sosiego.
Hoy desde que hablé con tu hija he tenido un pequeño bajón. Supongo que debido al cansancio, o quizás no.
Pero tengo que olvidar ese mensaje dirigido a la línea de flotación del ánimo y las fuerzas que nos hacen falta para seguir día a día hacia delante.
Te voy a decir lo único importante en lo que tengo que seguir pensando y es que pase lo que pase en mi vida te sigo queriendo como si estuvieses aquí junto a mí
TE QUIERO, MI AMOR, TE ADORO, TE NECESITO.
TE AMO, MARICARMEN, TE AMO.

2 comentarios:

MC dijo...

La primera vez...

Esta es la primera vez que escribo en este espacio. No se qué decir ni qué explicar, solo se que desde hace un tiempo, mi vida y la de todos los que me rodean, han cambiado radicalmente. Hasta ahora no me había decidido a escribir. No encuentro las palabras exactas para describir cómo me siento. Nunca serán exactas. Sin embargo, ahora si tengo la necesidad de escribir.
Cuando mami se fue y leimos lo que dejó escrito, pensé en hacer lo mismo. De hecho, compré una libreta que hoy día sigue guardada en mi maleta roja, con la que tantas veces he viajado y junto al periódico en el que aparece la esquela del día 5. Lo único que hay escrito en ella son los sms que me enviaron amigos, conocidos, compañeros, etc. dandome su más sentido pésame.
No me es fácil escribir, no se por dónde empezar y mis ideas van y vienen sin sentido, sin orden y afectando a mis sentimientos. Llevo un par de días que siento algo de ansiedad, una presión fuerte en el pecho y todo sucede con la mayor naturalidad y el mayor aturdimiento posible. En una parada de metro, dirigiéndome al trabajo... En mi mente la imagen de mi madre y mi propio subconsciente diciéndome: "¡ya no está!, ¡es que tu madre ya no está!, ¡no vas a volver a verla!, ¡TU MADRE!. Y comienza una sucesión de imagenes que me atormentan, recuerdos.
Es todo muy extraño porque esa es la realidad, y la vida que llevo, ¿es fantasía? No, no lo es. Pero entonces, por qué siento que todo ha sido un sueño cuando lo he vivido todo?. Quizás no lo quiero aceptar o no se asumirlo. Sentimientos contradictorios, verdad?
Intento ser positiva y a veces lo consigo. Quiero pensar en mi madre y que directamente aparezca en mi rostro una sonrisa, la que ella me enseñó, de la que ella disfrutaba. Sigo pensando cuando voy a casa, que ella estará allí y me abrirá la puerta con su rostro iluminado. Y así es. Algo que me ha enseñado recientemente mi padre, y que tanto a él como a mi nos ha dado mayor tranquilidad es saber y sentir que ella está con nosotros. Entonces, cuando siga yendo a casa, y mi padre me abra la puerta, estarán allí los dos dándome la bienvenida. Los dos en uno.
Sin embargo, no hayo del todo la calma, la paz interior. Creo que el motivo es que aquí en Madrid no hay nada de ella, por tanto no puedo sentirla. En Málaga, simplemente viendo el azahar de los naranjos y oliendo su aroma, siento revivirla. Y es que Málaga, ya no solo es la ciudad en la que vivía, sino es mi familia, es todo mi ser, es la esencia de mi madre y el calor de mi padre, mi hermana Estefanía y mi hermana Cristina. Os quiero a Todos. Esta es mi primera vez...

Luis Miguel dijo...

La pérdida es ya irremediable, pero su amor es eterno, perdurable y nuestro.
Con los ojos nublados al leer tu comentario, te digo: queremos que pienses todo lo que has tenido con nosotros, todo lo que te queremos, que las imágenes deben darte la tranquilidad de que estamos contigo, antes, ahora y siempre.
Con un nudo en la garganta me llevo la presión de tu pecho. Vive, sé feliz, ése fue mi objetivo con tu madre, hacerla feliz, y ese debe ser el tuyo también ser feliz para que ella siga siéndolo.
Te queremos, hija.